domingo, 11 de abril de 2010



Muchas veces la gente se asombra por lo que llevamos alado de uno, y afirma y repite gastar la adolescencia en enserrarse en uno, y nosotros mirando atentos sabiendo que nada de eso es lo que sentimos. Ya deje de tener palabras para decirte lo que siento por vos, lo que me haces sentir cada vez que veo tus ojos, cuando veo que me acompañas sin cansarte, me enseñas sin limites, y me queres con dulzura. Vivir alado tuyo es sentir que la felicidad recorre por mi vida. Gracias por hacer que cumplir estos veintiocho meses sean diferentes a esos meses cumplidos, y por hacerme seguir dando cuenta que somos el uno para el otro, que las peleas son detalles que nos enseña la vida. Gracias por este finde semana hacer que se guarde en nuestros recuerdos. Gracias María Luz, por enseñarme en tu lenguaje.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

el perfume que lleva al dolor