domingo, 10 de enero de 2010

La vieja palabra destino quiso sorprender a su suerte, le cruzó en medio del camino la sonrisa de la muerte. Bellos dientes para una sonrisa, dijo, pero no para volver a verte si el destino lo tiene planeado echada estaba tu suerte. Lo que hay después de un espejismo es la sed al veneno, maas fuerte jugos que al paladar de la vida lo embriaga y lo diviierte. Y en el frio de aquel invierno le quedaba una cita pendiente allaa por el barrio.
jamas volvere a verte. Sera el intento a bscar lo que valore ,tu vida buscar termina en encontrar pero como saber, si tuvo lo que queria. Asi como volver a empezar todo termina de repente pero no me digas adios solo decime hasta siempre
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el perfume que lleva al dolor